martes, 27 de agosto de 2013

Generación "V"

"¿Realmente estas haciendo lo que te hace feliz?", es el título de un vídeo que vi hace unos días en Youtube, por el título parecía simple discernir el contenido, pero la verdad es que logro llevarme más allá del ya complejo hecho de evaluación de mi situación actual, mi lugar en el mundo hoy y mi futuro no muy lejano.

En el vídeo se habla de las distintas generaciones que se han definido en el mundo moderno luego de la época de guerras que marcaron el siglo XX, pasando por el individuo que entendía que para llegar a ser alguien debía obtener un buen empleo que le asegurará un lugar estable en la sociedad, casa, carro, espos@, hijos y una jubilación asegurando su vejez exitosa; luego a mediados de la 90 una generación que entendía el valor de lo que buscaba la anterior pero que la idea de alcanzar el éxito cuando el cuerpo no nos permitiera disfrutarlo no parecía muy divertido, así que porque no acelerar la llegada del éxito? Y lo lograron, jóvenes profesionales con una pasión indetenible por alcanzar ese estatus a lo que podríamos decir la edad de oro (27 a 33 años), y jóvenes gerentes, directores y porque no? Accionistas.

Finalmente la nueva era, el esperado siglo XXI, y llega una generación que redefine el éxito, no es solo alcanzar una meta, que por supuesto no deja de ser importante, pero a diferencia de las anteriores esta generación no concibe alcanzar el éxito sino se disfrutó el camino, si no se es "feliz" mientras trabajas por alcanzar tu meta, lo cual me parece fenomenal porque va de la mano con esa frase que dice "trabaja para vivir, no vivir para trabajar" cosa que uno difícilmente cumple, se llaman los Millennials. El 54% de ellos ya poseen o planean tener su propio negocio, tienen mentalidad digital, fluida y colectiva, les recomiendo echarle un ojito al video para mejor detalle.

Ahora bien, parece lógica esta evolución, pero si extrapolamos esto en Venezuela, si hiciéramos una encuesta, podríamos ubicarnos en alguna de estas generaciones? El venezolano común, cuales son sus ideales? Realmente somos un Eudomar Santos (a las nuevas generaciones revisen en Youtube la novela por estas calles y entenderán), "como vaya viviendo vamos viendo" es nuestro lema?, confieso que es un conflicto para mi, porque percibo que gran parte de  la colectividad de nuestra nación vive el día a día, valora el hoy pero solo porque es el presente y mañana ya es otro dia, me deprime ver la decadencia de las infraestructuras y me siento impotente que no podamos ser como esas grandes ciudades del primer mundo o para no ir muy lejos nuestros países hermanos, como lo define Mario Briceño - Iragorry: "nuestra gran tragedia cultural de pueblo radica en haber llegado sin llegar... Porque un pueblo que no medita el valor de sus propios recursos ha de caminar los caminos opuestos que conducen a la desesperación o a la presunción" . Sin embargo, conozco un grupo de personas talentosas, con un potencial enorme y que seguro se identificarían con los Millennials  y también es seguro que más temprano que tarde estarán emigrando del país porque a ellos nada los detendrá.

Por esta razón es que se me ocurre que llego el momento que tropical icemos una generación, la cual llamare  generación  "V", obviamente haciendo honor a la primera letra del nombre de nuestro país, es decir unos Millennials pero adaptados a la realidad de la Venezuela de hoy, que aunque nos duela como un golpe en el hígado no va de la mano con el mundo fuera de nuestras fronteras a excepción del alto consumo de productos importados, pero que tiene fortalezas en ese grupo que les mencione y que me da una esperanza de avance, no se sí porque no me queda otra opción pero he decidido ver el vaso medio lleno, ojo sin dejar de ver que sí no buscamos más agua en algún momento se vaciará.

Por hoy llego hasta aquí, en otro momento hablare más de la Generación V y de sí he logrado algún avance pero les adelantó que me siento optimista porque tenemos una fortaleza: "quienes se adaptan mejor, pueden evolucionar con los cambios"

Yunilza

De generación o Degeneración?

En días pasados, abriendo un enlace de youtube donde se hablaba sobre las diferencias entre las últimas tres generaciones, me encontré con la incógnita sobre a cuál de estas pertenezco, y luego de aceptar que formo parte de esa denominada Generación X, me di cuenta que existen muchas cualidades o características de los llamados “millenials” con las cuales me siento identificado. 

Pero luego dando un paso más allá pude caer en cuenta que son esas mismas características pero llevadas al extremo las que conforman un comportamiento que repudio al máximo  y que además es bastante frecuente entre nuestros trabajadores de todos los niveles. Es decir, estos llamados Millenials, creen, desean y buscan con ferviente empeño el éxito, que para ellos  consiste en obtener lo que se desea a corto plazo. A diferencia de quienes como yo, pensamos que el éxito es consecuencia de una vida de esfuerzo continuo, que si bien rinde frutos en el camino, su epitome se alcanza luego de un largo periodo de tiempo. Esta filosofía, por llamarla de alguna manera, no es ni más ni menos correcta en ninguno de los casos, simplemente, son enfoques distintos sobre cómo llevar nada más y nada menos que nuestras vidas.

Pero como no es extraño, nosotros siempre tratamos de venezolanizar las cosas, así que al igual que hicimos en un pasado con los equipos Mc and Dale, que venezolanizamos hasta llevarlos al criollo Macundales. Ahora transformamos el millenialismo  en lo que a mi parecer no es más que un Hedonismo extremo. Es decir, y aquí es donde entran nuestros trabajadores, no es poco frecuente escuchar propuestas de contratos colectivos, donde el trabajo no especializado, para el cual hace falta casi ninguna preparación, se pretenda remunerar, al igual o incluso en mayor nivel, que aquel para cual hace falta una preparación de más de una década, tanto en estudios universitarios de Pre y Post grado, además de una trayectoria de ejercicio o experiencia acumulada en el área. Todo bajo la premisa de que las necesidades, derecho a surgir, e igualdad de condiciones, son comunes en ambos grupos. Pero esto, no es más que el deseo de obtener un beneficio por el cual no se lucho o lucha, es decir se quiere obtener algo sin realizar ningún sacrificio. 

Permítanme aclarar que no  estoy en contra del disfrute temprano de los beneficios que nos ganamos con esfuerzo, en lo que no estoy de acuerdo es en pretender obtener algo sin ganárselo, y esa mis imaginarios lectores, es precisamente la raíz de lo que nos sucede como sociedad. Si no tenemos una casa, es porque alguien años atrás nos quito ese derecho, si no tenemos carro, es porque algún usurero lo tiene acaparado esperando que engorde su precio, si no encontramos café, es porque una empresa no produce para derrocar un gobierno. En conclusión, nunca es nuestra responsabilidad, nunca somos nosotros como colectivo y como individuo, prácticamente responsables de nada. Si el sueldo no me alcanza, es porque los accionistas de la empresa se están enriqueciendo a costa de mi trabajo (lo que es cierto y además correcto) por lo que debemos pedirle que nuestros salarios sean tan altos, que las ganancias de la empresa se dividan entre todos y la cuenta de capital de la empresa y accionistas no se incremente en ningún momento.

De seguir así, lo que sucederá con toda seguridad, es que un grupo cada vez mayor de personas, no se motivara en dar más de lo estrictamente necesario en su labor, es decir que por ejemplo, un medico cumplirá con su horario y luego marcara su tarjeta y se ira de la emergencia sin importar si hay pacientes aun por atender, y nadie querrá invertir o crear nuevas empresas.
Por eso me avergüenzo de tratar de buscar como pasar de una generación X a una Degeneración Venezolana del millenial, que en criollo yo llamo FLOJO.

Carlos J. Guillén


Y entonces… ¿A qué generación pertenecemos?

Wow… Escribir esta vez fue duro, aún no entiendo si por la complejidad del tema, por el hecho de que me haga caer en un nuevo auto análisis o que sencillamente estos días he llegado sólo con ánimos de dormir. Pero analizando, y adrede voy a hacerlo de afuera hacia adentro, lo que sucede con las generaciones; el surgimiento de los milenials y su forma de ver la vida, la cual comparto en gran parte: soy impaciente, creo que el éxito llega por méritos y no necesariamente con experiencia, definitivamente no me llevo bien con los organigramas verticales y creo categóricamente que cómo luces no influye en lo que eres capaz de lograr. Aunque nadie desmiente que la imagen tiene poder.

¿Y qué pasa con estos milenials alrededor del mundo? Pues se están adueñando del él. ¡Con su filosofía de disfrutar el camino y no esperar al destino consiguen éxito! Hacen lo que disfrutan y ganan dinero. Son flexibles y se adaptan… 

Ajah… ¿Y en nuestro país eso podrá hacerse? ¡Pues claro que sí! Y en esta frase voy a dejar que corra mi dosis de optimismo de la semana, o del mes mejor. Pero no debemos confundir flexibilidad con conformismo, no es que nos adaptemos a la situación crítica para estancarnos allí, es que dentro de esa situación que denominamos crítica encontremos salidas, opciones o escapatorias si es necesario. Yo sí creo que todo esto (no voy a tocar la situación política y económica que hasta mi sobrino de 7 años conoce porque aprendió a escoger entre comer afuera o comprar un juguete, ya que entiende la idea de presupuesto) nos dejará una enseñanza, millones de personas han comenzado sus negocios propios, las instituciones educativas ganan dinero formando emprendedores, la gente está ideando maneras diferentes de producir… Yo sólo espero que esto no sea sólo con la idea de sobrevivir, sino de prosperar. De mejorar.

Como anécdota: en la universidad inicié un negocio con, en aquél momento mi novio y mom (pseudónimo de mi madre); que llegó a rendir un buen margen de ganancias, pero que también me llevó a algunos sacrificios, pero del que finalmente  obtuve grandes aprendizajes: tienes que diferenciarte del resto, el contexto puede hacerte ganar o perder y aunque trillado… Sólo ganas arriesgándote. 
Y a propósito de este escrito, el próximo fin haré un ensayo de negocio, del que luego les contaré mis experiencias.

Deseo que cada uno encuentre algo que disfrute hacer y esto les resulte rentable.

Johanna Márquez.